Un amigo me recomendó Hopeless: The Dark Cave. Me dijo que era uno de los juegos a los que estaba enganchado en este momento. Me enseñó unas imágenes del juego y no dudé en probarlo para hacer este análisis en El Jugón de Móvil.
Como sus propios creadores lo definen, este es un encantador juego de terror. El estudio de Upopa Games lo ha desarrollado con MOAI, una plataforma de desarrollo de juegos open source. Un sencillo juego de acción en el que deberás matar a los monstruos que acechan en la oscuridad.
¿Hay esperanza de sobrevivir en Hopeless?
La dinámica del juego es muy fácil. Debes dar tap a los monstruos que aparecen desde las sombras y que intentarán coger nuestros asustadizos y armados Blobs. No es conveniente que nuestros personajillos se asusten demasiado ya que pueden matarse entre ellos.
Parece algo fácil, pero Hopeless te mantiene en alerta. La atmósfera creada te obliga a estar en tensión y es fácil que dispares sin querer a un nuevo Blob que pretendía unirse al grupo surgiendo temerario de la sombra. Las oleadas de monstruos te obligarán a ser rápido y disparar a discreción para intentar sobrevivir.
El juego dispone de distintos boosters que podrás comprar con las monedas que vayas ganando en tus partidas. Un Blob con una pistola grande, que todos los Blobs estén armados con arpones o lanzallamas, ir directos a la acción, un mutiplicador por dos de puntos, empezar con dos o más Blobs, etc… Cada uno tendrá un coste mayor o menor según lo que nos pueda ayudar a sobrevivir en nuestra siguiente partida.
Tenéis que tener en cuenta que los Blobs se agrupan hasta un límite de 6. Al llegar a 6, todos excepto uno desaparecen, volviendo a dejar a nuestro personaje solo ante el peligro. Eso, evidentemente, suma monedas y puntos a nuestro marcador.
Trailer de Hopeless
Análisis de Hopeless por categorías
Jugabilidad:
Ya he comentado que a pesar de que es fácil aprender a jugar a Hopeless, la dificultad del juego aumenta exponencialmente a medida que el tiempo pasa. Las oleadas de monstruos son más abundantes y a medida que subes de nivel algunos de los enemigos que aparecen no mueren con un simple disparo.
El juego es adictivo. Pero la dinámica siempre es la misma, con lo que podría llegar a hacerse algo monótono.
Gráficos:
Los personajes son sencillos, pero están bien acabados y son perfectos para el ambiente que se crea en pantalla. Los Blobs son unas monas masas amorfas, simples, pero que brillan, tienen luz propia. Además sus expresiones van cambiando según lo asustados que están. Incluso llegan a apagarse. Los monstruos, de aspecto agresivo y peludos son más oscuros y de ojos y colmillos blancos para esconderse mejor entre las sombras.
En el escenario, una cueva oscura en la que apenas no se ve nada, se mueve alguna cosilla. Pequeños detalles que nos hacen pensar que allí hay criaturas escondidas.
Sonido:
La ambientación de Hopeless. The Dark Cave está muy lograda y parte de el mérito se lo lleva el sonido. Una música de tensión constante, tenue, como un susurro que se mezcla con sonidos de verjas metálicas que se abren, el chirrido de puertas, el sonido de lo que podrían ser cigarras, etc. Todo ello solo es interrumpido por los gruñidos de los monstruos, nuestros disparos y los efectos de las monedas que vamos ganando.
Veredicto final:
Upopa Games ha logrado crear un juego sencillo y adictivo. Mantienes la tensión gracias al clima generado con el sonido y el sombrío escenario. Es fácil que se te escape el dedo al ver algo acercarse y ver que acabas de liquidar a uno de tus compañeros. Perderás a muchos de ellos, pero dispara a discreción cuando las oleadas de bestias te ataquen. Lo pasarás bien y querrás más.