Parece que últimamente todas las franquicias y sagas de PC dan el salto a nuestros bolsillos. Esta vez es el turno de Peggle Blast, la versión de bolsillo de esa saga de PopCap que se basa en soltar bolas para romper todos los bloques naranjas del escenario antes de que se nos acaben.
Peggle Blast opta, como ya es costumbre en estas conversiones a móvil, por el sistema de microtransacciones, es decir, que el juego es gratuito pero nos permite realizar pequeños desembolsos para lograr algunas mejoras.
La mecánica básica consiste en que disponemos de un cañón en la parte superior de la pantalla que podemos rotar y contiene un número limitado de bolas. Estas bolas al chocar con los bloques que componen el juego los destruyen y al caer abajo son eliminadas. Nuestro objetivo es claro, eliminar todos los bloques naranjas. Para lograrlo deberemos utilizar los rebotes y potenciadores para alcanzar los bloques situados, muchas veces, tras obstáculos.
En Peggle Blast, entre la cámara lenta y que salta el himno a la alegría, te hace sentir que has logrado algo épico
Pero no todo es bueno en Peggle Blast
Algo que me ha molestado ha sido que para pasar de un mundo a otro (cada mundo es un sector del mapa en el que tienes un poder característico) tienes que invitar a amigos de Facebook a que jueguen o esperar algunas horas para poder entrar o, por supuesto, pagar. Entrar a jugar, completar lo dos niveles que me faltan de un mundo y tener que esperar 5 horas para poder seguir jugando me revienta.
Trailer de Peggle Blast
Análisis de Peggle Blast por categorías
Jugabilidad:
Este es un juego de mecánicas sencillas pero extremadamente adictivo. Que en cada mundo cuentes con poderes distintos te hace querer seguir avanzando para ver que te vas a encontrar. La dificultad me parece bastante bien balanceada, sin darte la sensación de que no puedes superar un nivel sin tener que pasar por caja. Y las batallas contra el unicornio malvado, partidas por turnos contra la IA, aportan variedad al juego.
Gráficos:
Peggle Blast no es ningún portento gráfico, pero cumple con su cometido y la gran cantidad de efectos que utiliza, como el zoom con cámara lenta cuando estamos apunto de golpear el último bloque naranja o los fuegos artificiales al ganar, hacen de este un juego muy vistoso y llama la atención.
Sonidos:
Creo que tiene uno de los mejores apartados sonoros en cuanto a juegos casuales se refiere. Lograr destruir el último bloque a cámara lenta y que salte el himno a la alegría te hace sentir que has logrado algo épico y sin precedentes cada vez que completas un nivel.
Veredicto final:
Peggle Blast es muy divertido y adictivo pero le pesa el hecho de ser free to play. Lograr hacer carambolas de cuatro o más bloques naranjas te hace sentir el mejor jugador del mundo y esa misma sensación te acompaña durante todo el juego. Si queréis un juego para echar partidas rápidas sin pensar mucho pero que ofrezca un pequeño reto, Peggle Blast es vuestro juego.